Gordos, la película.

Gordos es una de las películas preseleccionadas por la Academia del Cine para ser candidata al Óscar a la mejor película en lengua extranjera junto a Mapa de los sonidos de Tokio y El baile de la Victoria (hoy se sabrá). Aunque esto no fue lo que me atrajo para ir a verla, sino la metamorfosis que vivieron sus actores para poder rodarla, alguno de ellos llegó a engordar 35 kilos y después perderlos para dar vida al personaje.
Básicamente trata de la vida privada de varios protagonistas unidos en un grupo terapéutico cuya finalidad es la de perder peso. Con perdón, la película podía haberse titulado perfectamente Gordos fo**adores, ya que se le da tanto protagonismo al problema de la obesidad como al sexual de cada uno, además hay varias escenas algo subidas de tono pero eso si, nada de cuerpos esculturales e irreales, sino todo normal y corriente, como tu y como yo.
Aunque la película es "coral" (se cuentan varias historias simultáneamente sin un protagonista claro), si creo que lleva el peso (nunca mejor dicho) de la película el personaje de Enrique, interpretado por Antonio De la Torre. Algunos lo recordarán haciendo reportajes cachondos en el programa deportivo La Jugada de Canal Sur TV y otros lo recordarán de la miniserie Padre Coraje, después ha hecho teatro y mucho cine apareciendo en películas como Volver, Salir Pitando, Mataharis o Azuloscurocasinegro. Además de De la Torre, podemos destacar a Raul Arévalo, Teté Delgado o Verónica Sánchez.
Si queréis divertiros mientras reflexionáis sobre lo absurdo que puede llegar a resultar la obsesión humana por alcanzar el cuerpo soñado, no os la perdáis.